El equipo formado por los neurocirujanos Kwon Jeong-tek y Lee Mu-Yeol ha trasplantado con éxito un cráneo completo de titanio impreso en 3D, salvando a una paciente en una compleja y urgente operación.

La mujer, de 60 año, llegó al hospital universitario Chung-And de Seúl con un repentino e intenso dolor de cabeza, y una tomografía mostró que padecía una hemorragia cerebral subaracnoidea, lo que implica un sangrado entre el cerebro y los tejidos que lo recubren.

Esta es una patología grave y una seria amenaza para la vida del paciente, con una mortalidad aproximada del 20 al 40% de los pacientes internados, más un 8 a 15% de mortalidad en los primeros minutos u horas, en la etapa prehospitalaria. Por lo tanto, la velocidad es crucial en la intervención.

Cráneo completo en tres piezas de titanio impreso en 3D para un niño con hidrocefalia.

Cráneo completo en tres piezas de titanio impreso en 3D para un niño con hidrocefalia.

Inicialmente, los neurocirujanos bloquearon el acceso de sangre al cerebro para evitar el sangrado, y quitaron una parte del cráneo de la paciente para aliviar la presión causada por la inflamación del cerebro.

Sin embargo, su cerebro colapsó en la parte del cráneo que había sido quitada, requiriendo un trasplante completo del cráneo.

Antes de esto, ya se han realizado implantes de grandes porciones de cráneo, como en el caso de un implante en tres piezas para un niño con hidrocefalia o el implante de toda la parte superior para el traumatismo provocado por un accidente.

La ayuda extra para la mujer coreana llegó del KITECH, el Instituto Coreano de Tecnología Industrial. Allí, usaron los escaneos que se habían hecho a la paciente para crear una reproducción específica de su verdadero cráneo, y la fabricaron de una pieza en puro titanio impreso en 3D. Al haber sido fabricada de esta forma, el nuevo cráneo encajó perfectamente, y la operación fue concluida con éxito.

Este tipo de intervenciones no sólo se han llevado a cabo por iniciativa de las instituciones sanitarias, pues no hace mucho tiempo Michael Balzer salvó la vida de su esposa al imprimir para los doctores en 3D una representación de las tomografías que tenía, y que permitió planificar una cirugía que no se había planteado antes de visualizar la pieza físicamente por parte de los médicos.

Imagen de un cráneo impreso en 3D en material plástico

Imagen de un cráneo impreso en 3D en material plástico

No es la primera vez que unos cirujanos han reemplazado grandes porciones de cráneo. La tecnología de este tipo de trasplantes siempre ha sido bastante imperfecta, usando en ocasiones cemento (que, claramente, no es lo ideal), pero el titanio impreso en 3D es fuerte, ligero y permite diseñar para que la pieza encaje en el paciente tan bien como su cráneo original.

No sólamente es muy eficiente a nivel de costes, sino que es muy rápido (y ya sabemos que las barreras de velocidad se van rompiendo en impresión 3d como todas las demás).

Buenas noticias para personas que necesitan trasplantes, incluso urgentes.

Titanio impreso en 3D e impresión de metal

La tecnología de impresión 3D en metal avanza en velocidad, precisión y costes de impresión es revolucionaria para el sector médico.

Las impresoras de metal aún tienen precios elevados, aunque poco a poco aparecen impresoras más económicas y competitivas, incluso de código abierto, es decir, libre de patente para que cualquiera pueda fabricarla y usarla. Sus usos, además, tienen un valor muy alto.

Las impresoras 3d de metal son, como todas las demás, máquinas de fabricación aditiva que van añadiendo capa tras capa de material hasta conseguir el objeto, lo que presenta ventajas significativas sobre la fabricación tradicional, como evidencia el caso de la cirugía puntera de la que hablamos en este artículo.

Impresión 3D médica

Entre las cosas que la impresión 3D médica puede hacer ya no sólo se encuentra la planificación quirúrgica, sino también complejas e importantes prótesis, desde costillas a implantes de cráneo parciales o completos, hasta el tratamiento de enfermedades raras.

El sector médico aprovecha de forma muy trascendente las posibilidades de velocidad, personalización y geometrías complejas que ofrece la impresión 3D.

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